Thursday 22 November 2007

Amor siamés (II)

Triste despedida y amorosa. Ella llora, Él la consuela, comparten un único sentimiento. Muchacho alejándose, sorteando al fingido moribundo perro normal. Los ojos rojos de ambos fijos en los del otro. El cielo oscuro, como antes, pero más amenazante. El coche aparcado cerca de allí.

Él se aleja cabizbajo, las manos en los bolsillos. Sudoroso. El viento que acaricia su faz seca las lágrimas que manan de sus ojos y fluyen sobre sus mejillas encendidas. Abre el coche, mira hacia la casita, halla de nuevo sus ojos. De nuevo brotan las lágrimas. Entra y arranca, le tiemblan las manos mientras mira los retrovisores. Tiene que esperar, se acerca un camión. Por fin se va. Vuelve por última vez la vista y por última vez ve los ojos, deduce el pensamiento, adivina las lágrimas.

Ella no lo había dejado de mirar, de admirar. Está hundida, no puede gritar el último adiós. Sudorosa. Ahora está sola. Entra en casa y nota la presencia del amado. Pone la tele pero nada puede hacer. Comienza la espera eterna del que nunca retornará.